viernes, marzo 3
El Job
Para variar, algo pasó.Pensaba llegar de vuelta del sure, subir un par de fotos y quejarme de lo corto que se hace el tiempo cuando vas tranquilo por la vida. En fin, que llegando a Futrono y llendo a Valdivia, me llama Jaime para avisarme que al Job lo atropelló un tren ¡La chucha!
No pude leer los diarios sino hasta el viernes, y, los que me conocen, no se extrañarán de mis lagrimones.
La imagen del Job, pasteleando por ahí, se me vino a la cabeza ("Hola pus Paula Santis!", con su eterno chaleco - polera a rayas, y una sonrisa de a de veras)... creo que eso es lo que agradezco, que su sonrisa es de a de veras. Porque puede llegar a ser molesto, pero es así. Y sabes a qué atenerte.
Como me dijo mi amigo Galgani, es fuerte el tema.
En fin, a seguir rezando.
Fuerza Job!