jueves, febrero 2
Suerte.
¿Existe?
¿Son acaso puras coincidencias?
¿Es posible que uno cree su vida o hay algo externo que nos rige?
En los últimos días, han ocurrido cosas que me hacen pensar que no todo es tan malo. Hay pequeños hechos que han mejorado las cosas, que me hacen pensar que la gente no es tan mala como la pintan, y que el aire no es lo único gratis.
Lo único negativo, y hasta cierto punto, es que a la Muchi Muchi no le renovaron el pase en el supermercado. Pero eso le da la oportunidad de postularse a otra pega, una con mayor responsabilidad (ojalá se lo tome así).
En fin, entre el miércoles pasado y ayer han pasado cosas. Se funó el Huaso Enrique, pero apareció El Sindicato. La Vicky se hizo la corcheteguatoplastía y se le inflamó una costurita, pero ya está harto mejor (y la sonrisa no se la saca nadie). El telón pesaba más de lo que parecía, pero apareció un conocido-probableamigo que prestó el auto para movilizar todo. Y una gatita abandonada ya tiene casa (la dificultad ahí radica en el nombre... no estamos de acuerdo)
| posted by Paula Santis P. at 9:01 a. m.
